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miércoles, 27 de noviembre de 2013

La cara oculta de ser Au pair

Capítulo 5: Acontecimientos inesperados en Berlín

Parece que fue ayer cuando el blog comenzó su andadura en este mundo blogger. Y es que en realidad hoy hace tan solo una semana. Muchas cosas han pasado hasta día de hoy pero recuerda, esto no ha hecho nada más que empezar.


En el capítulo anterior, ya trabajando como au pair en una familia en Berlín, me sentí muy cómodo desde el principio, pues los niños eran bastante tranquilos...


Tan solo llevaba unos pocos días en Berlín cuando mi viaje como aupair iba a dar un inesperado giro, que nunca había previsto... 



Pero dejemos eso para un poco más adelante y centrémonos en la capital de Alemania, lugar que junto a Londres está siendo el destino principal de marcha de muchos españoles en búsqueda de un país sin el PP y sin políticos corruptos un país con mejor futuro laboral.

Berlín, como ya dije anteriormente, es una ciudad que mola y mucho. Lo más me llamó la atención fue el precio en general de las cosas. Y es que hacer la compra en Berlín puede resultar más barato incluso que en España. 


                                                              Esta compra no llegó ni a los 3 Euros 

O los alquileres de los pisos, que puedes encontrarlos fácilmente a precios inferiores que en Madrid o en Barcelona. Ir a comer fuera un kebab o una pizza te puede costar alrededor de 2.5 Euros. ¡¡Lo que oyes maricón!!  Vamos, un auténtico disfrute para los amantes de los buenos precios y la buena comida.


El punto débil de Berlín son los alemanes. Son unos auténticos hijos de puta un poco serios. Sus cabezas son cuadradas. Como en todas partes, siempre hay de todo, pero mi percepción general fue de que eran robots gobernados por Ángela Merkel fríos, sosos y sin gracia.
Y es que, con esos cuerpos, solo faltaba que también fueran simpáticos... ¡No, que me enamoro maricón!

Como ya dije, la ciudad es encantadora, hay arte por todas partes, en cada edificio, en cada calle... Berlín tiene los mejores chulazos en grindr por metro cuadrador algo especial.



El clima es una puta mierda malo, el verano no está nada mal, pero no esperes ir cualquier época del año si no quieres ver otra cosa que cielos grises y frío, mucho frío.

La fiesta de Berlín es otro tema que hay que tratar. La noche tiene muchísima coca vida. 
Creo que es la ciudad con la gente encocada y puesta de todo más loca y divertida que me he encontrado nunca. Las drogas sustancias de la noche son tan económicas, que la gente en vez de hacer botellón o comprar bebida como hacen los españoles, allí directamente cogen a sus camellos amigos y compran un par de sustancias mágicas para toda la noche. Y creedme caris, no son orfidales...


                                    En un pub cualquiera  de Berlín 

 Como ya mencioné, estaba muy contento con la familia. Jamás había previsto que aquella tarde de Agosto la mujer decidiera hablar conmigo para decirme que se marchaban durante una semana a casa de su madre. No habían pasado ni 5 días en aquella casa trabajando como aupair cuando ya tenía vacaciones. ¡¡Cómo te quedas maricon?!

L. me dijo que había tenido una fuerte discusión con su novio, yo la había oído desde mi cuarto pero pensé que simplemente estaban haciendo otra cosa, así que la creí. Lo que está claro es que nada es lo que parece...


Me dijo que necesitaba una semana para pensar, que estaba agobiada por su novio, con el que también compartía trabajo, que al día siguiente se llevaría a los niños a Flensburg por una semana y que me quedara en casa mientras tanto.
Aquella noche yo estaba con un cuadro de ansiedad flipando. No sabía si beberme una botella de vino o mezclara con ansiolíticos  tomármelo bien o tomármelo a mal. 
¡Se marchaban! ¡Yo me quedaba solo en casa! ¡Sin nada que hacer!



Aquella noche L. se abrío a mí en la cena y trás 5 copas de vino un poco de vino empezó a contarme lo que venía siendo un noviazgo tortuoso alemanes cari, ¡qué esperas! 
Yo acepté aquella nueva situación al principio de mala manera, pero fue muy pronto cuando empecé a verla con otros ojos... 



A la mañana siguiente, había ruido de maletas por casa. Los niños y ella me dieron dos besos, cogieron su coche y se marcharon. Me dejó las llaves y yo me quedé allí en el porche, viendo como el coche se alejaba más y más...
Estaba resignado a ver la nueva situación con buenos ojos, pero a mí aquello ya me empezaba a oler un poco mal...


 No te pierdas en el siguiente capítulo: "Berlín, home alone" 


Desde Londres
Siempre con cariño
@robbiemilk






lunes, 25 de noviembre de 2013

La cara oculta de ser Au pair

Capítulo 4: Mis primeras horas como Au pair en Berlín

Pues nada, aquí vamos de nuevo con una nueva entrega en mi blog.
Cómo habréis podido percibir, tanto el nombre como el diseño son distintos al anterior.
Cuándo decidí escribir sobre mis andanzas como aupair en el extranjero, nunca pensé que más de la mitad de mi familia entera sin contar a mis primos segundos tanta gente se interesaría sobre ello, así que tras más de 1000 de visitas en menos de una semana decidí crear un nuevo y próspero blog.  
¡Bienvenidos a Orfidal en la Pirámide

                             Así reaccionó la gente esta semana  ante mi aparición en el mundo blogger

Dejando atrás España, como bien recordáis llegué a una familia en Berlín aquella noche del 7 de Agosto de 2013 para trabajar como Au Pair.
Yo de niños sabía nada más bien poco, de hecho las reacciones de la gente cuando se lo conté eran de plena incredulidad.


Mi primera mañana como au pair fue de nervios, muchos nervios. Además de que no tenía nada de experiencia como niñero, el idioma fue un importante agravante. ¡EL IDIOMA! Pero la verdad es que di con dos niños que eran bastante tranquilos, nada de lo que me esperaba encontrar.



 Mis tareas eran bastante sencillas: estar con los niños, buscar chulazos en grindr, preparar la comida, y ordenar un poco de vez en cuando. La verdad es que no podía quejarme para nada.
Me sentí muy cómodo con la familia desde el primer momento, la mujer y yo teníamos mucho feeling y los niños eran adorables y super pacientes conmigo cada vez que me hablaban en alemán. Creo que la mujer había realizado al fin su sueño de mariliendre de tener a su mejor amigos gay las 24 horas en casa estaba satisfecha conmigo.
Lo que me sorprendió de verás fue como realmente el trabajo de aupair se basaba básicamente en vigilar a los niños mientras veían la televisión.
 ¡Podían pasarse horas delante de ella!


Pero pronto descubrí uno de mis mejores amigos en Berlín, la bicicleta. Berlín es una ciudad hecha a medida para ello. Da gusto moverse con ella. Y mucho más en verano. Los veranos son templados y muy agradables. Berlín es una ciudad que invita a encender el grindr y no dejar títere sin cabeza pasear en bicicleta y perderse por la ciudad.


La usaba para todo. Para ir a la piscina, para ir al centro, para ir a hacer la compra. La bicicleta y yo nos hicimos inseparables. Me bastaba encender la música y deslizarme en bicicleta por las calles de Berlín para evadirme del mundo. 


 Mi relación con Berlín ha sido de puro amor-odio.  Y no nos vamos a engañar, es una ciudad muy muy guay. Alternativa, barata, diferente, con personalidad. Pero si tu alemán no es de haber estado machacándote libros y libros durante mínimo un año aceptable, vivir aquí puede ser exasperante. ¿Sabéis lo que es ir a una tienda, a inscribiros en algún sitio, o ir a comprar algo y que cada vez que vayáis se líe parda porque ni la dependiente sabe inglés, ni tú sabes alemán y ni ella está por la labor de ayudarte?


Y es que hablar de las excentricidades de los alemanes ocuparía un blog entero, así que dejémoslo para más adelante. Y hablemos simplemente de lo que nos interesa, la verdadera razón por la que vine a Berlín el atractivo de los alemanes. 
La raza aria de la que el mayor hijodelagranputa de toda la historia mundial  Hitler se enorgullecía sigue presente en las calles de esta magnífica ciudad. Los alemanes están tremendos son muy atractivos. Yo diría que los más atractivos de Europa junto a los suecos. Pero cari vidas mías gente ¿Realmente el físico es lo único que importa? SÍ SÍ SÍ 

                                               Chulazo nº1

                                                                              
                                                                              Chulazo nº2

Si te vienes a Berlín a dar el braguetazo de tu vida con un alemán como aupair, permíteme que te de algunos consejos:

1.Los españoles damos puto asco para ellos estamos mal vistos, muy mal. Hacerse paso en Alemania hoy día es como ser un ecuatoriano en aquella falsa época del PP y la burbuja inmobiliaria, donde parecía que nos faltaban bancos para comprar y comprar propiedades, mirando por encima del hombro a los sudamericanos que venían a trabajar aquí.
Sí, que nos hayan rescatado económicamente o la masiva emigración a su país no ayudan demasiado. Por no hablar de la actual marca made in Spain de chorizos y ladrones que los medios de comunicación se encargan de difundir.

2.Si eres la típica pija que masca chicle constantemente, viste polos de lacoste o de caballos gigantes en el pecho y se enorgullece de llevar banderitas en la mano, cari, te doy un consejo, pero no te lo tomes a mal. ¡Cambia de vestuario antes de venir a Berlín! ¡Arráncate el brazo y de paso las pulseras de España! Berlín es una ciudad muy muy alternativa, aquí la marcas están mal vistas, y si de paso también llevas banderas de España como atuendo WTF!! los alemanes se pensarán seriamente en revivir el holocausto con los de tu chupipandi no sabrán por donde cogerte viva.



3.Los alemanes son gente muy seria y estricta. Viven por y para las normas. Que no te sorprenda que te fusilen con la mirada si te saltas un semáforo. Para ellos los españoles somos gente que debería pertenecer a África, gente a la que contratar como aupair y explotar, gente que le pague la permanente a la Merkel a costa de intereses económicos tras un rescate financiero espontánea, cariñosa y divertida. 


4.Los alemanes son los hombres más buenorros del planeta y punto. Así que ponte las pilas, porque la competencia es muy muy muy alta. 


Una ciudad nueva, una familia estupenda, un verano magnífico. No te dejes engañar, porque no todo lo que reluce es oro. Cuando te marchas de au pair al extranjero, recuerda que debes estar preparado para cualquier cosa. Y yo no lo estaba cuando de repente, algo ocurrió...


En la siguiente entrega de Orfidal en la Pirámide: "Acontecimientos inesperados en Berlín"

Desde Londres
Siempre con cariño
@robbiemilk



sábado, 23 de noviembre de 2013

Capítulo 3: Llegada a Berlín

¡Hola de nuevo mariconzuelos gente! Te invito a vivir en esta entrada mis primeras sensaciones como aupair en Berlín. ¿Preparados?

Dejar España de un día para otro no es tarea fácil. Son muchas las cosas que estás dispuesto a perder a cambio de la movilidad exterior de la que el PP se regodeaba la oportunidad de encontrar un futuro laboral mejor fuera. 
Y el verdadero drama es que tenemos un país que es la envidia de toda Europa en cuanto a clima, gente y gastronomía pero que no es capaz de sostenerse desde el punto de vista económico. 
 


 El día de mi despedida no fue un día fácil, la gente de mi alrededor actuaba de forma extraña conmigo, me trataban de la mejor forma posible, como si nunca más fueran a volver a verme. De camino al Aeropuerto de Málaga, no pude evitar rememorar en mi mente una vez más cada uno de los años que había vivido en la ciudad con más bisexuales por metro cuadrado del país la Costa del Sol. Estaba jodido roto por dentro. Aunque estaba ilusionado con irme de aupair a Berlín, me costaba mantenerme positivo al 100%. Porque no me estaba yendo, me estaban echando de mi país.

El momento de subirme al avión creo que no hubo tranxilium orfidal valium tila suficiente para relajarme. Mi fobia a volar no hizo mi marcha mucho más fácil.

                               Yo minutos antes de embarcar...

Llegué una noche de verano el 7 de Agosto de 2013 a la capital de Alemania. Mi primera impresión con la ciudad pese a que era de noche fue qué frío maricón!! positiva.
Con todo mi equipaje, de madrugada, la familia de acogida, pese a que timbré y timbré decidieron no abrirme y tenerme como casi 30 minutos esperando fuera. 


Finalmente, después de fundir el timbre abajo y haber despertado a medio bloque de nazis alemanes, conseguí entrar. La mujer me recibió y mi primera impresión con el apartamento fue ¡pero qué monada maricón! muy positiva. 
Tras hablar unos 5 minutos con la mujer de las típicas chorradass de ¿que tal el vuelo? ¿estas cansado? el viaje y demás, me dispuse a irme a dormir a mi cuarto. La familia me había dejado un pequeño detalle en la mesa de mi cuarto. Todo muy vegano, eso sí.



 
Por mí me hubiera puesto a deshacer las maletas pero estaba tan cansado tanto física como emocionalmente que lo único en lo que pensé fue en fundir el grindr como si no hubiese mañana  caer en redondo a la cama.
Necesitaba dormir, el día siguiente no iba a ser un día precisamente fácil. 


Miré por la ventana, todos dormían. Disfruté de aquella sensación unos instantes. El sabor a nuevo, a inesperado. Empecé a ver aquella aventura con otros ojos. Era verano de 2013 y me dije a mí mismo ¡A por todas maricón!   ¡Es mi momento! ¡Voy a disfrutar  de esta oportunidad!
Y de algún modo, cuando apoyé mi cabeza aquella noche sobre la almohada, me pareció vislumbrar, después de mucho tiempo, un amago de sonrisa en mi rostro...


No te pierdas en el próximo capítulo: "Mis primeras horas como Au pair en Berlín"

Desde Londres
Siempre con cariño
@robbiemilk




jueves, 21 de noviembre de 2013

Capítulo 2: Preparativos Au pair

Hola de nuevo a todos y todas. Estoy muy contento con que estéis siendo algo más de 4 gatos  bastante gente la que cada día se acerca a mi blog para leer un poco más sobre mi experiencia estos últimos meses en el extranjero.
En esta nueva entrada vas a conocer como son los días de una persona que ha decidido ser una chacha 24 horas en el extranjero  un au pair. Me estoy refiriendo al trámite de encontrar familia, entrevista y demás... ¿Estás ya listo maricón? ¿Preparados? 

  

Debo confesaros algo, desde siempre tuve la predilección por el Reino Unido, su cultura, su atmósfera, sus hooligans tatuados sin camiseta, sus programas de Televisión... Desde muy pequeño, aferrado a mi libro de Harry Potter, ya soñaba despierto con que en algún momento de mi vida pondría rumbo a tierras británicas. Mi idea siempre había sido la de irme a Londres y casarme con alguno de los miembros de los One Direction, violar a Daniel Radcliffe, montarme una vida paralela a lo Skins  encontrar un trabajo que me permitiese una vida acomodada.


Pero por más que busqué, me fue imposible encontrar ninguna familia británica. Nada más registrarme en la web para encontrar una hostfamily me asombré con el hecho de la cantidad de familias alemanas que coincidían con mis criterios de búsqueda. Y así fue, antes que canta un gallo en un par de días una familia alemana de Oldenburg estaba muy interesada en mí y sin entrevista ni nada me decía que me querían como aupair y que si podía irme con ellos en Agosto. Ante la idea de irme a Oldenburg, un pueblo al norte de Alemania, yo estaba un poco ¿donde vas maricón? indeciso con la idea de irme. 
Una semana después de eso apareció una nueva familia en Berlín con la que finalmente me marcharía...

                                 Mi reacción al saber que me marchaba a Berlín
                                
                                 La reacción de mi madre cuando le conté que me iba de Au pair

Tras encontrar a mi nueva familia en Berlín todo era ilusión de nuevo. Berlín era una ciudad que siempre me había pintado muy bien. La familia se componía de una mujer periodista de 28 años y sus dos niños de 10 y 8 años. Eran herbívoros veganos y por lo que conocí inicialmente de ellos todo me pareció muy gayfriendly moderno. Así que cada vez estaba más y más ilusionado con la idea de irme de aupair a Alemania.
Tenía 2 meses ante mi inminente marcha a Berlín, así que pronto comencé a estudiar la lengua más asquerosa del mundo alemán. De un momento a otro me había convertido en uno de esos miles españoles que buscaban desesperados algun hogar donde no mencionaran la palabra crisis a cada rato un futuro mejor. Y yo me encontraba más decidido que nunca... 


Muy pronto llegó el día de la temida entrevista con la familia. Pese a la puta mierda de trabajo que era poca importancia que le concedí al aupair, estaba nervioso con la idea de la entrevista. Así que tras 4 chupitos, 3 copas de vino, una cerveza me enfrenté a la temida entrevista.

                                Yo a  escasos minutos de la entrevista con mi famlia de Berlín

Recuerdo como esa tarde avisé a toda mi familia que durante una hora iba a estar teniendo una entrevista a través de skype y mi padre, que nunca ha sido mucho de tecnologías, tuvo la ocurrencia de preguntar que a qué hora venían los entrevistadores. WTF!!!???? PERO TÚ TE CREES MARICÓN!!!???


 Y todo debió salir sobre ruedas, porque a los pocos días cuando me iba pegar un tiro si no tenía una respuesta no podía más de impaciencia, la mujer me escribió un email diciéndome que al final me había elegido a mí para ser su aupair a partir de Agosto. O SEA TÍA QUE FUERTE ¿NO? ¡¡¡Qué emoción!!!

                         Mi reacción al saber que me iba a Berlín como Au pair

Y así como hoy te lo he contado, el día 7 de Agosto de 2013 puse finalmente rumbo a Berlín, dejando atrás las tapas a 1.5 Euros, los vinitos en una terraza, los mejores productos hacendado del Mercadona  a mi familia y amigos me marché a vivir del cuento otro año más a vivir una nueva experiencia en el extranjero. Pero atentos, aquí nada es lo que parece, porque cuando te marchas de aupair cualquier cosa te puede pasar.


Colectivo gay del mundo Amigas y amigos, ahora que ya conoces como me marché de aupair a Berlín, el drama, los secretos, el misterio, las discusiones y en definitiva la verdadera vida de un au pair, lo que será la esencia de este blog, están aún por llegar...
Súbete a la pasarela y agárrate bien si no quieres caerte porque esto no ha hecho nada más que empezar...


No te pierdas en la próxima entrega: "Llegada a Berlín"

Desde Londres
Siempre con cariño
@robbiemilk




miércoles, 20 de noviembre de 2013

Capítulo 1: ¿Cómo decidí hacerme Au Pair?

Después de un primer aperitivo explicativo del au pair en sí y ahora que a todo el mundo le ha quedado claro que el aupair es una puta mierda es un trabajo muy digno, es turno de adentrarse en los quehaceres de cómo surgió esto, la verdadera razón de porqué hoy estoy aquí escribiendo esto a miles de kilómetros de los chulazos malagueños mi familia y amigos, encontrando mi lugar en la fría y solitaria Londres...



Como todos sabéis, la carrera de Periodismo terminó y 6 años intensos en Málaga de risas juerga tras juerga amores y desamores estudio habían quedado atrás, junto a otros 6 meses de prácticas en una escuela como Community Manager en Benalmádena. Mis días en Málaga se esfumaron para siempre, era rumbo de volver a mi ciudad de origen Granada. Me quedé un poco mal cuando me enteré que de nuevo debía abandonar Benalmádena, pues le había cogido muchísimo cariño a mi lugar de prácticas.



Una vez en Granada, sabía que encontrar trabajo no sería fácil, pero nunca imaginé que fuera tan jodidamente difícil complicado. Era una situación muy amarga en mi vida, en casa, sin actividades que hacer y en un país con una tasa de paro del 55 % en jóvenes, que no pronosticaban un trabajo estable en mi vida a corto plazo, salvo que fuera a la tienda más cercana y me comprase unas buenas rodilleras.
                                                      

Como dije fueron días amargos, necesitaba hacer algo cuanto antes en mi vida, mis días en Granada no podían seguir siendo de mirar facebook mirar badoo mirar gayromeo ver videos en youtube del Festival de Eurovisión buscar trabajo en infojobs, ir al gimnasio y poco más... 
Aunque lo sobrellevaba con valiums y alguna que otra copa de vino saliendo con mis mejores amigos, no tardé pronto en encontrar una salida, que me llevaría al fin a miles de kilómetros de España.
                                         Yo cada noche antes de irme a dormir...

Era una tarde calurosa cualquiera del mes de Mayo cuando estaba en casa subiendo fotos de postureo a Instagram trasteando el ordenador cuando sin saber cómo ni porqué un vídeo de youtube llegó a mi pantalla. Un chico muy mono valenciano aupair en Londres relataba sus días aquí y animaba a los españoles a abandonar un país inmerso en la crisis económica y sus númerosos recortes. (Sí tú, chico aupair valenciano, si sigues por estas tierras que y llegas a mi blog por casualidad que sepas que...)
Creo que hay momentos que de un modo u otro marcan nuestra vida para siempre, pero ese preciso instante supe que mi vida iba a cambiar de nuevo, para siempre...


Y me dije a mí mismo: ¡Aupair allá voy!

 

 No te pierdas la siguiente entrega: Preparativos Au Pair

Siempre con cariño
@robbiemilk